Si, es totalmente obligatoria su revisión, pues debes asegúrate siempre de que su funcionamiento es correcto. Y es que es parecido a los chequeos médicos, debe ser todos los años, sin embargo, suele ser obligatorio su revisión cada dos años, aunque hay algunos países que se realiza cada año.
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Asimismo, lo que es el contador, las tuberías y llaves, deben pasar por un súper control, ya que cada cinco años se debe hacer una inspección completa a las instalaciones. Claro que también depende del tipo de caldera, es decir, su potencia, pues de ahí también depende cada cuanto se realizar la revisión.
Por ejemplo, si en la vivienda se encuentra una instalación de calefacción que funciona con gas o electricidad, su potencia debe ser como de 79 kW, de ser así, si es obligatoria la revisión una vez al año como mínimo.
Si en tal caso la caldera suele ser de más de 70kW, la revisión debe ser obligatoriamente cada mes. Los calentadores de agua con potencia entre 24 kW y 70 kW, si es obligatorio revisarlo cada dos años. Salvo que sea de 24 kW, de ser así, seria cada cinco años.
¿De que trata una revisión de caldera?
Las revisiones consisten en la comprobación del funcionamiento de cada elemento de la caldera, por ejemplo, el funcionamiento de las tuberías, las llaves o las gomas, y por supuesto, en el estado en el que se conserva el equipo.
Estas revisiones se llevan a cabo en manos de técnicos autorizados, quienes debe contar con los conocimientos necesarios y estar altamente capacitados para realizar este servicio de manera rápida y eficaz. Su coste debe rondar entre los 10€ y hasta 50€.
La revisión es fundamental para toda caldera ya que en ella el técnico autorizado se debe cerciorar de que las instalaciones se encuentran en perfecto estado, funcionando correctamente y a su vez, teniendo un mantenimiento adecuado realizado periódicamente.
De no realizar la revisión, la empresa suministradora se verá en la obligación de suspender el servicio por no cumplir con las normativas, ya que este servicio es un tipo de medida de seguridad, ya que al no realizar esto cuando es debido, se deduce que las instalaciones se encuentran en mal estado y con un deficiente rendimiento.
Recuerda que este servicio se debe realizar en manos de expertos, ya que de lo contrario si lo haces tú mismo sin tener experiencia y conocimientos, podrás poner en riesgo la vivienda. Este servicio garantiza la durabilidad, seguridad, eficiencia y buen funcionamiento.
Si quieres garantizarle seguridad a tu familia y disfrutar de aquellos beneficios que ofrecen las calderas, debes realizar obligatoriamente este servicio porque de lo contrario podrás tener multas y en caso de algún accidente, el seguro no se verá en la obligación de correr con ningún gasto.
En pocas palabras, sale más económico seguir los reglamentos y realizar la revisión de la caldera como se estipula, es mejor eso que tener grandes gastos por multas, accidentes que pueden llegar a ser lamentables o que la empresa que suministra suspenda el servicio.